“Para alcanzar la paz, el fútbol nos enseña a trabajar en equipo”: Jürgen Griesbeck

Tomado de OlaPolítica.com
Por Janette Guzmán/Subdirectora Ola Política

 En Rio de Janeiro, Brasil, Colombia dará ejemplo al mundo en construcción de paz a través del Plan Decenal de Fútbol, que lidera el Ministerio del Interior y que se muestra como una de las más exitosas experiencias en el trabajo con jóvenes y barras o torcidas como se les denomina en el país carioca, donde además se conmemoran los 20 años de la muerte de Andrés Escobar.

El fútbol es el deporte más popular del mundo. El que más pasión genera. El que concentra la atención del mundo más aún en Brasil 2014. Así lo diagnostican no solo los fanáticos del balón pie  sino también los expertos en trabajo social con los jóvenes en situaciones vulnerables como Jürgen Griesbeck, un alemán educado en Medellín quien se inventó la metodología de fútbol en paz, junto con el profesor antioqueño, Alejandro Arenas.



Jürgen es un viajero permanente que recorre el mundo de lado a lado llevando su mensaje de convivencia, a través de Street Football World, una ONG alemana que organizó en Río de Janeiro, Brasil, el campeonato de fútbol callejero, auspiciado por la agencia de cooperación alemana GIZ y la Agencia Brasileña de Cooperación, ABC, en el marco de su proceso de responsabilidad social, llamado Fútbol para la Igualdad.



En un perfecto español, aprendido en las comunas de Medellín con los muchachos afectados por la violencia, asegura Jürgen que el fútbol es una herramienta que cautiva y fortalece el liderazgo de los jóvenes frente a los desafíos actuales.



Este es el caso de Colombia, donde a través del Plan Decenal de Fútbol y el proyecto Fútbol en Paz, que lidera el Ministro del Interior, Aurelio Iragorri Valencia, se busca erradicar la violencia dentro y fuera de los estadios colombianos, y hacer del fútbol la llave maestra del posconflicto y la convivencia a nivel nacional.



Para Jürgen Griesbeck la historia del fútbol y la paz comenzó hace más de 20 años, cuando el asesinato del futbolista  Andrés Escobar marcó su  vida para siempre.  Fue entonces cuando pensó que el fútbol es mucho más que un simple juego riesgos que hasta puede salvar vidas. 



Hoy cuenta dos décadas después, cuenta que gracias al trabajo con los muchachos, logró conformar una red mundial de organizaciones sociales que trabajan con el fútbol, denominada Stree football World, que tan sólo en el 2013 benefició a más de 750 mil jóvenes alrededor del planeta. Jóvenes de diversas etnias y credos, que corren detrás de un balón con la esperanza de encontrar un mejor destino.  



De esta red hoy hacen parte más 100 organizaciones en 70 países. En el marco del mundial Brasil 2014,  Jürgen Griesbeck habló así para Ola Política:



OP: Como es la relación entre fútbol y la búsqueda de la paz?

JG: 20 años atrás cuando ocurrió la muerte del recordado futbolista  Andrés Escobar surgió esta idea. Este fue un momento de impacto que me llevó a dejar mis estudios  y a fundar la organización Futbol para la paz, en la ciudad de Medellín. Sentí una enorme responsabilidad ciudadana.  Allí nació la idea de que las mujeres y los hombres deben estar juntos, que el juego debe ser sin árbitros  y que la primera goleadora  debe ser la mujer.



OP: ¿Qué tiene que ver el fútbol con la consolidación de la paz?

JG: El idioma del fútbol es compatible con todos. El fútbol y la paz exigen un trabajo en equipo. Si no se trabaja en equipo no se alcanza la paz y se sacrifican más vidas. El objetivo es alcanzar la paz.



OP: ¿Por qué Colombia ha sido invitada a mostrar su experiencia del fútbol en paz en el marco del Campeonato Mundial de Fútbol Brasil 2014?

JG: El Ministerio del Interior apoyó la creación de una política pública que es el Plan Decenal de Fútbol, en el que se integran los esfuerzos del Gobierno Nacional con la Dimayor y la Federación Colombiana de Fútbol, las organizaciones sociales Colombianitos, Tiempo de Juego, Contexto Urbano y Street Futbol World, junto con los directivos del fútbol profesional y las barras.



Hoy estamos en Brasil donde se disputa el mundial de fútbol para mostrar como ha sido el proceso de esta exitosa experiencia colombiana.



OP: ¿ Cuál es la mayor experiencia que le ha dejado el trabajo con los jóvenes, el fútbol y la paz?

JG: Mi mayor experiencia ha sido la de entender que existen otras realidades en los jóvenes y que las sociedades son complejas, donde en ocasiones se les dice a los muchachos que su vida no vale mucho, pero esto con la ayuda del fútbol puede cambiar, pues los muchachos encuentran en el deporte la oportunidad de ser alguien con futuro, una persona de bien.  



El fútbol crea redes de confianza y eso es gratificante. Pero no todo es alegría, también hay frustraciones. Como el poco reconocimiento que se hace desde la industria del fútbol, que debería trabajar en fortalecer su responsabilidad social. Desde Sudáfrica 2010, la FIFA quiso cambiar esta tendencia.



OP: ¿Qué mostrará Colombia en Brasil con el tema de Fútbol en Paz?

JG: Queremos mostrar el poder del fútbol en Colombia para la construcción de la paz, el poder del trabajo colectivo, el poder de establecer una política pública en conjunto para cambiar realidades y generar oportunidades.



OP: ¿Cuáles son los retos de Uds. después del mundial?

JG: Que no se pierda el trabajo avanzado, que no se pierda el momentum, que las cosas no queden en el papel,  y que el papel no se quede en el escritorio; que continúe la voluntad política para construir convivencia y que los resultados sean aplaudidos como en un estadio de fútbol.



OP: ¿Cuál es su mensaje a los lectores de Ola Política y a los fanáticos del fútbol?

JG: El Plan Decenal de Fútbol es el resultado del trabajo en equipo con los jóvenes porque hay que  entregar la confianza a ellos.  Envío este  mensaje a los tomadores de decisiones y a los jóvenes para que demanden más espacios de juego y crean en los sueños para que estos se hagan realidad en la construcción de la convivencia y de la paz.