Pronunciamiento del Alcalde Progresista Marcelo Torres sobre los recientes hechos políticos en Magangué

Ante el asedio, luces de avance

Magangué, Cheverísima Stereo, jueves 25 de mayo de 2012

En las últimas semanas, diversos miembros del Concejo municipal han sometido a una especie de fuego graneado los actos de la presente administración. Se ha tachado estos actos de inobservancia de las normas legales, de grandes irregularidades y hasta de corrupción. Con altisonancia se ha descalificado cuanta medida o decisión haya adoptado el actual gobierno municipal.

Debiera celebrarse el espectáculo de un concejo municipal actuante, presto como atleta joven al control político, sobre todo porque como quien dice, hasta la víspera, hasta el 31 de diciembre del año pasado, en Magangué imperaba el agreste paisaje de la intimidación cuyo correlato, el silencio ante los atropellos, cobijaba incluso a la honorable corporación pública. Lo que pasa es que festejo tan encomiable tendría que reconocer que el nuevo clima político de libertad, de ejercicio efectivo del control político, no es en absoluto ajeno al establecimiento del nuevo gobierno municipal sino que es precisamente una de sus consecuencias, y una de las primeras y de las más importantes. 

Y hay que llamar la atención sobre por qué se ha omitido tan significativo reconocimiento: es que si este se hiciera, saltaría a la vista que en la implacable conclusión con que se quiere condenar y descartar a la actual administración hay algo que no cuadra. No nos referimos a las críticas ni al señalamiento de eventuales equivocaciones de la administración; el control político oxigena la democracia. Lo que no cuadra es que mientras frente al régimen de la horrible noche la crítica fuera tan morosa y el control político tan lerdo, ahora, ante el nuevo gobierno municipal sean tan aceleradas para desconceptuarlo como unilaterales en la apreciación de su situación.

La unilateralidad en política consiste en destacar única e interesadamente un factor, y no el más importante, en tanto que se hace caso omiso o se niegan otros que juegan un papel clave. Una comprensión objetiva, verdadera, del momento actual que vive Magangué y su gobierno, reclama que se tenga en cuenta por lo menos 3 factores: 1) los graves problemas que heredó esta administración originados en el período de la horrible noche; 2) la inevitable fase de adaptación o ajuste que experimenta todo gobierno en su inicio; y 3) los logros que a pesar del corto lapso transcurrido pueden anotársele a la actual administración.

El gobierno del verdadero cambio no es reacio a reconocer que en materia administrativa debe actuar como alumno aplicado y que tiene mucho que aprender; que puede haber cometido errores por inexperiencia e imprevisión pero nunca con la dolosa intención de actuar contra el pueblo ni de transgredir la ley. Que expulsará de sus filas a quienes incurran en actos de corrupción. Que reconoce la legitimidad del control político procedente del Concejo municipal aunque no comparta las conclusiones de algunos de sus miembros.

En materia de la ola invernal que se avecina, los magangueleños deben saber:

Que fue sellado por esta Administración el boquete Los Comuneros, en el Jarillón Sur del área urbana; esto beneficia de modo inmediato a más de 8.000 personas y se conjura así la posibilidad de que el perímetro urbano se inunde por el suroccidente por la creciente del río.

Se rehabilitó y está funcionando una motobomba de 12 pulgadas, que mantiene controlado el nivel de las aguas lluvias y residuales retenidas por el Jarillón. El municipio está suministrando el combustible.

Se rehabilitó y está funcionando la electrobomba del sector Nueva Esperanza en el Jarillón Sur de la cabecera, lo cual beneficia a más de 1.500 habitantes que no se afectarán por el crecimiento de las aguas lluvias y residuales, retenidas por el Jarillón.

Se rehabilitaron las dos electrobombas de la Estación Sur, en el Jarillón Sur de la cabecera, lo cual beneficia a más de 4.000 habitantes del sur-oriente, que no padecerán los estragos sufridos el año pasado.

Conjuntamente con la gobernación, se recupera el sistema de bombeo de la Estación Norte, Belisario, con lo cual se brinda tranquilidad a los habitantes de los numerosos varios barrios que sufrieron por la insuficiencia del sistema averiado. Se espera que hoy mismo quede reparada y en funcionamiento la motobomba del sector de Belisario, en el Jarillón Norte.

Se ha taponado el boquete El Tiburón, entre Yatí y Santa Fe, por donde penetró gran parte del agua que inundó la vez pasada los corregimientos del norte; este trabajo requirió de aportes complementarios que hizo el municipio a una contratación financiada con recursos de Colombia Humanitaria que resultaron insuficientes; se benefician así más de 3.000 habitantes y se protegen más de 4.000 hectáreas. Además, gracias al trabajo mancomunado entre comunidad, ganaderos y esta administración, por iniciativa de la primera dama, se rellenaron varios puntos en el mismo tramo.

También se taponó provisionalmente el boquete El dique, en Santa Fe, por donde anteriormente penetrara la mayor parte del caudal del río que inundó los corregimientos del norte, con lo cual se benefician más de 4.000 habitantes y se protegen más de 8.000 hectáreas.

Esta administración gestionó ante la Unidad Nacional del Riesgo y logró que se aprobaran alrededor de 450 millones de pesos para las obras de protección frente a la creciente del río en San Sebastian de Buenavista. Los funcionarios y el ingeniero que vinieron aseguraron que en 3 semanas empezarían las obras. Ya esas tres semanas se cumplieron y esperamos que se inicie esa obra que contrarreste la ola invernal.

Se viene realizando el suministro de costales a las comunidades que lo han requerido, de las existencias que el Comité Departamental de Atención y Prevención de Desastres tiene almacenados en el Batallón de Infantería de Marina y ha puesto a disposición de Magangué y otros municipios vecinos.

Gracias a la gestión de esta Administración, la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo ha dispuesto un importante aporte para el suministro de combustible de las bombas diesel, a los sectores de Los Comuneros y Belisario, al Cuerpo de Bomberos, a la Cruz Roja, a la Defensa Civil y a particulares, para utilizar en la actual etapa invernal, y que por falta de a.c.p.m. no se emplearon racionalmente en el pasado.

En un término no mayor de 48 horas, se suscribirá con la interventoría y el contratista el acta de inicio de las obras de la vía Yatí - Las Brisas, después del viacrucis vivido por la tramitología burocrática en Invías, con la póliza de cumplimiento que fue y vino de Bogotá con una lentitud desesperante.

Se están conformando comités gremiales y de la comunidad para enfrentar la ola invernal, entre otros el de comerciantes de La Albarrada. En los próximos días, se producirá el desembolso de la Administración para las obras de taponamiento de la muralla del río al igual que para terraplenes y diques protectores en varios corregimientos.

El tránsito de Magangué inició su recuperación. Gracias a nuestra gestión, la Policía nacional le ha otorgado al municipio un período de gracia de tres meses para pagar el convenio correspondiente de $50 millones. En próximos días, la Policía de Carreteras del departamento realizará operativos durante 3 veces por semana y se empezará a cobrar comparendos.

Magangueleñas y magangueleños, eso es todo por hoy; buenos días y buena suerte en el día de hoy: y mucha fe en nuestro porvenir.